–Voy a amarte toda la vida. Dicho esto, Virna se zambulló en el río. Se veían las burbujitas que iba soltando. Un caminito que iba apareciendo y desapareciendo en el agua verdusca, bolitas de aire que se perseguían unas a otras. Hasta perderse viboreando y alejándose un poco. Tuve que esforzarme hasta el dolor deSigue leyendo «all life long»